domingo, 23 de enero de 2011

Atesorando



Cuando tenía 9 o 10 años, aproximadamente yo le temía mucho a la oscuridad, siempre veía sombras en mi casa cuando todos salían, una vez la impresora se encendió sola cuando la computadora estaba apagada y empezó a sonar. Yo me sentaba frente a la imagen de la virgen que tengo en mi cuarto y le decía : Protégeme. Luego no soportaba más y me ponía a gritar : Vete, no te tengo miedo, vete, conmigo pierdes el tiempo. Y por mi ventana aparecía una luz que imagino yo que era la de los carros, pero me sentía más calmada, segura. Obviamente todavía permanecía el miedo en mi cuando los días pasaban. Me encontraba yo una noche en mi cuarto, mis papás en los suyos.
-Mamá, me traes agua por favor? (no quería salir porque tenía miedo)
-No, anda tú(quería que de alguna forma venciera el temor)
Yo respiré , avancé hasta llegar a la puerta de mi cuarto, iba a voltear para avanzar por el pasadizo cuando siento que una luz fortísima alumbró en mi rostro desde mi lado derecho. Yo volteo y veo a Jesús vestido de blanco, con una luz roja, otra blanca y él brillaba de amarillo. No podía creerlo, alzó sus brazos, yo me quedé tonta, me sonrió y desapareció. Yo fui corriendo a tomar agua(en serio me moría de sed), y luego fui al cuarto de mis papás a contarles, no sé si me creyeron, no me interesó yo estaba contenta a pesar de que no sabía quién era exactamente, me alegraba el hecho de ver el rostro de Jesús. Tiempo después mi mamá sacó una pintura inmensa que su amiga le había regalado, la abrió y yo me quedé tonta de nuevo, dije: ÉL ES, YO LO VÍ, ÉL ES. Era precisamente el Señor de la Misericordia.
Cuando cumplía 11, creo … en mi cumple, yo estaba abajo jugando con mis amigas (7 pecados, jaja) de pronto levanto el rostro, veo a la virgen rezando en el último piso de mi edificio, no podía creerlo, se veía tan hermosa.
Vanessa, mi actual hermana de agrupa me dijo: qué pasa? , yo le dije : Mira
Ella también la vio, nos quedamos hecha piedra, no podíamos creer lo que nuestros ojos presenciaban.
A pesar de todo lo que me había pasado, estuve con un chico que era agnóstico y cambió mi mentalidad, cambió mi forma de hablar, actuar, etc. Yo era otra y no me sentía bien con quien era, solo logré obtener muchos problemas, vivir de la peor manera, no sabía qué hacía ni a donde iba, no creía en nada ni en nadie, mucho menos en mí. Finalmente cuando me obligaron a ir a las charlas de la confirmación conocí lo que llamo “vivir de verdad”. Descubrí mucho, encontré la razón de mi vació interior. Mi retiro fue preciso. “He aquí la esclava del Señor, hágase en mi según tu palabra”, fue lo que me tocó. Una frase que el espíritu santo buscó que yo leyera para que formara parte de mi vida cristiana, una frase que me enseña un cielo inmenso. El año pasado me pasó algo un poco extraño : me levanté 3 días seguidos, 3, 4 y 5 am respectivamente, A REZAR! Era como si alguien me hubiese levantado porque yo soy más pesada para despertarme, jajaja. Hace unas pocas semanas leí la vida de Sta. Faustina de Kowalsa, a quien se le apareció el Sr. De la Misericordia y , mejor no te cuento, léelo tú y sorpréndete. http://www.corazones.org/santos/faustina.htm
El domingo 16 de enero fuí con mis padres al Callao, un lugar muy bonito por cierto. Eran ya las 5 y las campanas de la iglesia sonaban, mis padres deseaban entrar, pero yo quería ir a la misa de mi comunidad, sin embargo lograron convencerme. Entro, me arrodillo, miro al lado derecho y lo vi de nuevo, esta vez pintado en un cuadro tal cual y como lo vi cuando tenía 9 o 10: Vestido de blanco, una luz amarilla resaltando su rostro, otra roja y celeste saliendo de su corazón. No podía asimilarlo, mis ojos se llenaron de lágrimas, volvía a encontrarlo en mi corazón. "Jesús en Ti confío"
Saliendo de misa divisé un hermoso cielo, color amarillo ocre, muestra de paz , alegría. No dudé en fotografiarlo, era espectacular.
"Nosotros comenzamos verdes como una hoja verde de madurez
luego nos volvemos mas serenos manso como una hoja amarillo ocre, pero tenemos q morir como como la hoja roja ardiendo de amor" San Alberico
Dispuesta a todo por Ti, Señor.
Tati Loyola Silva